La plaza
Syntagma de Atenas se ha convertido de nuevo este lunes en epicentro del
respaldo griego a su Gobierno, una vez rotas las negociaciones con las
instituciones europeas.
Miles de
ciudadanos se han congregado en la emblemática plaza para respaldar la postura
del Ejecutivo de Alexis Tsipras, que el pasado viernes anunció la celebración
de un referéndum, el próximo domingo, en el que los ciudadanos decidirán si
aceptan o no las demandas formuladas por los acreedores internacionales a
cambio de nuevos fondos que eviten la suspensión de pago de la deuda griega.
El
referéndum formula una pregunta simple: "¿Debería la propuesta que fue
sometida por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario
Internacional en el eurogrupo el 25 de junio de 2015, que consiste en dos
partes que juntas constituyen su propuesta integral, ser aceptada?".
La casilla
del 'no' aparece como primera opción, por encima de la casilla del 'sí'. El
Gobierno de Alexis Tsipras, que rechazó la propuesta durante las negociaciones
porque la considera contraria a sus promesas electorales, ha instado a los
griegos a votar de forma negativa. La
mayoría de los mensajes que se escuchan en la plaza se orientan a esta opción.
La plaza se
ha convertido en barómetro del clima social
en el país y en los últimos días ha sido el lugar en el que se ha lanzado un
rotundo rechazo a las políticas de austeridad impuestas a Grecia por la
'troika' comunitaria.
"Este
país no está en venta ni puede ser chantajeado" o "Venceremos"
son algunos de los eslóganes que se pueden ver durante la protesta.